- Área: 55 m²
- Año: 2017
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Fotografías:Leo Espinosa
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Por muchos años las políticas de la vivienda social en México han provocado un crecimiento hacia las periferias de los centros urbanos, causando graves problemas para los municipios y para sus habitantes, pues estos desarrollos masivos se dan en zonas donde la tierra es muy económica, pero que no cuentan con los servicios urbanos necesarios; mismos que en algunos casos se provén, pero en muchos otros no. Estos lugares en su mayoría son lejanos y poco prácticos para vivir por los tiempos de traslado a las zonas de trabajo, por lo que en muchos casos se han abandonado, convirtiéndolos en lugares sumamente inseguros.
El municipio de Kanasín forma parte de la zona metropolitana de la ciudad de Mérida, el cual registra un fuerte crecimiento demográfico por la inmigración derivada de la búsqueda de mejores oportunidades laborales en la capital yucateca; dando lugar a una gran cantidad de asentamientos irregulares y a todos los problemas que esto acarrea consigo, entre los que destacan la falta de servicios urbanos, la delincuencia y el debilitamiento del tejido social. El programa de vivienda consiste en un esquema en donde el interesado cuenta con un terreno en una zona urbanizada, y se le apoya con el financiamiento y la asesoría técnica para que pueda acceder a una vivienda digna diseñada integralmente desde una metodología basada en el análisis contextual, la cual permite obtener un producto específico y a la vez versátil, capaz de vincular al habitante con su territorio y haciendo factible la posibilidad de vivir en comunidades consolidadas.
El prototipo básico tiene 55m de construcción, lo cual es un 20% mayor al promedio de viviendas del mismo rango. La volumetría responde a los usos y costumbres de la gente local, y a la optimización del espacio interior. El perfil poblacional actual vive en espacios reducidos, y busca sacar el mejor partido a sus propiedades, combinando en algunos casos actividades domésticas y productivas, lo cual considera el prototipo. Asimismo, su implantación es adaptable a las dimensiones de la mayoría de los lotes de la zona, y prevé un crecimiento progresivo y ordenado de acuerdo a los diversos escenarios reflejados en el análisis de los habitantes (trasero, lateral y superior).
El esquema de funcionalidad interior se desarrolla en dos crujías. La primera, de carácter social, está conformada por una estancia / sala de televisión, comedor, cocina, área para el altar y para hamacas. La segunda recibe dos habitaciones y un baño completo. Las áreas exteriores recuperan los valores del tradicional “solar maya” presente en la memoria de los habitantes originales del municipio, así como en la mayoría de los inmigrantes (que son de origen maya); adaptado a las necesidades y aspiraciones actuales. En la parte trasera considera áreas para lavado y tendido, para animales de traspatio, para siembra de especies vegetales comestibles, y para vegetación endémica. El alineamiento frontal genera un espacio abierto de carácter semipúblico que busca incentivar la seguridad barrial a través de su activación social.
El sistema constructivo considera muros cargadores en los extremos perpendiculares a la vía pública, conformados por bloques prefabricados de concreto, los cuales sostienen la losa de vigueta y bovedilla. Esto responde a las aspiraciones y sentido de seguridad de los habitantes, a la disponibilidad del material, a la replicabilidad de prototipo, al saber auto-constructivo actual de la zona, y a los recursos y tiempos disponibles para su ejecución. El clima de la región permite que en los lados frontal y trasero se implementen muros tapones (no estructurales) a base del mismo block de concreto, colocado de forma que funcione como celosía, a la cual se le coloca una tela mosquitero para una ventilación natural constante sin permitir la entrada de insectos.
Además de las características antes mencionadas, los muros de celosía matizan la luz intensa de la región, reducen la insolación, sirven como protectores contra el vandalismo y como rompe vientos para huracanes. El sistema considera canales interiores para drenar las posibles filtraciones de agua sin interferir con las áreas útiles. La materialidad propuesta reinterpreta soluciones populares para su integración al contexto construido, y elimina elementos cosméticos subjetivos, para destinar esos recursos a la calidad espacial y a la integridad estructural. Se plantean materiales aparentes que permitan la apropiación posterior del habitante.